Mes: enero 2016
En la radio…
El miércoles 25 colaboré en el programa de radio infantil «Menuda Voz» que se realiza en Carbajosa de la Sagrada (Salamanca). Un espacio radiofónico donde los protagonistas son los niños y las niñas y no existe guión. Durante una hora, más o menos, fui sometida a un interrogatorio (y mis compañeras de mesa también) sobre la violencia de género. También pudimos escuchar el manifiesto que se había leído por la mañana y se entregaron unos premios a quienes habían participado en el certamen de narración y dibujo contra la violencia de género. Fue una experiencia preciosa que espero poder repetir.
Os adjunto dos enlaces relacionados con «Menuda voz». En el primero podréis escuchar mi participación en el programa de radio. En el segundo os permite acceder al blog que han creado, donde se pueden ver, a través de imágenes y texto, las distintas colaboraciones que han tenido.
http://www.ivoox.com/programa-radio-sobre-violencia-genero-audios-mp3_rf_9593037_1.html
No miremos hacia otro lado
https://www.youtube.com/watch?v=cdwZbbL_-2M
Y entonces… el vacío
Comenzamos el año con un montón de propósitos, buenos o regulares, eso da igual, pero propósitos al fin y al cabo.
Pensamos en cumplir una serie de objetivos en el futuro a corto, medio o largo plazo y nuestras actividades se enfocan a conseguir eso, y no nos damos cuenta que hay que vivir el presente, que no importa lo que hicimos el año pasado, pues ya está hecho y no lo podemos cambiar. Tampoco importa lo que vayamos a hacer dentro de unos días porque podemos cambiar de opinión o, simplemente, se nos cruza por el camino otra propuesta más interesante y la tomamos. No somos conscientes que hay que vivir el hoy, sin preocuparnos en exceso por el mañana. Ya lo decían en El Club de los Poetas Muertos: Carpe diem amigo.
Hoy he recibido una noticia que me ha dejado fría en un primer momento pero, después, he tenido que parar un segundo para asimilar el mensaje. Tras esto, no he sabido identificar que me pasaba por la mente y por el corazón. Mi alma se ha encogido, mi corazón se ha tambaleado y mi cabeza ha empezado a funcionar mucho más deprisa intentando encontrar un motivo, una razón, una causa, una justificación.







