Hoy pensaba escribir sobre otra cosa, pero la «actualidad» le ha dado un giro a mi pensamiento.
Leyendo mi facebook he leído que mis queridas amigas y compañeras de Generando Igualdad están en la terrible situación, si la cosa no cambia, de tener que cerrar su sede por falta de recursos económicos.
Esta asociación madrileña me dio la oportunidad de realizar talleres con estas mujeres maravillosas. Por culpa de su forma de ser, actuar, por su implicación y por tantas y tantas cosas se han convertido en parte de mi vida. Puedo decir que en ella tengo amigas y que todas ellas (sí, pq son mujeres en su inmensa mayoría) son inmensamente geniales, auténticas, luchadoras, imparables, incansables, comprometidas, etc. Es una lástima q, si no se las ayuda, tengan que cerrar la sede cuando desde la administración, ésa que es la primera que les pone trabas, le siguen derivando casos y que no puedan atender a las mujeres que acuden buscando un lugar donde guarecerse, desahogarse, apoyarse… No estaría mal que pudiésemos ayudar un poquito. La labor que hacen es inmensa y muy muy necesaria, desgraciadamente.
Estamos con lo mismo de siempre: no damos dinero para que subsistáis, para que podáis hacer la labor que realizáis con tranquilidad, sin agobios; pero os seguimos mandando mucho trabajo (más que antes) y os seguimos exigiendo lo mismo o más si cabe. Es la pescadilla que se muerde la cola, es un círculo vicioso del que es casi imposible salir.
Como dicen en su blog, han tenido el reconocimiento nacional por el trabajo que hacen; pero eso no significa que no necesiten dinero para mantener los recursos materiales, ya no los recursos económicos.
Son mujeres que se mueven, que luchan, que arañan… son mujeres voluntarias que trabajan incansablemente por lograr una sociedad más igualitaria, por apoyar a mujeres que han perdido mucho para que se recuperen.
No puedo seguir escribiendo sin emocionarme, sin sentir dolor por lo que pueda pasar en uno o dos meses.
Los motivos de esta terrible situación lo explican muy bien en su blog.