El verano suele ser una época en la que yo trato de leer más libros que durante el resto del año. En esta ocasión creo que no lo he conseguido, pero cuando no se puede, no se puede.
En la actualidad estoy terminando un libro para padres/madres escrito a dos manos entre una mujer y su hijo preadolescente. Esta insólita pareja de escritores son de Valladolid y cada uno de ellos, desde su punto de vista, nos hablan bien clarito a las mamis y a los papis sobre cómo explicar determinados temas relacionados con la sexualidad a nuestros hijos e hijas.
Ha sido uno de esos libros que te llaman la atención cuando vas a la biblioteca, sobre todo por el título. Así que, lo agarré, le di la vuelta y leí la contraportada para saber exactamente de qué iba. Luego, cómo es habitual en mí, lo abrí, lo hojeé y, en este caso, me detuve en las fotos, las cuales me engancharon más.
Lástima que he tardado tanto tiempo en empezarlo, pero una vez comenzado, tengo que reconocer que se lee bastante bien y rápido.
El joven nos muestra las dudas que le surgen sobre determinados temas (menstruación, homosexualidad, métodos anticonceptivos, etc.) y nos explica cómo lo ven los niños y las niñas de su edad y más pequeños, cómo debemos explicarles las cosas, pues tendemos a hacer un mundo de un grano de arena cuando se trata de entablar una conversación sobre algo que tenga que ver con el sexo.
Cada capítulo termina con unas recomendaciones o consejos dadas por la madre y nos habla sobre cómo abordó ella los diferentes temas con su hijo.
El joven nos muestra las dudas que le surgen sobre determinados temas (menstruación, homosexualidad, métodos anticonceptivos, etc.) y nos explica cómo lo ven los niños y las niñas de su edad y más pequeños, cómo debemos explicarles las cosas, pues tendemos a hacer un mundo de un grano de arena cuando se trata de entablar una conversación sobre algo que tenga que ver con el sexo.
Cada capítulo termina con unas recomendaciones o consejos dadas por la madre y nos habla sobre cómo abordó ella los diferentes temas con su hijo.
El lenguaje que usan es muy cercano. No usan terminología extraña ni médica, ahí se encuentra el encanto del libro (entre otras cosas).
Yo os animo a que lo leáis, pues ayudará a más de un padre y madre a establecer esa comunicación con sus hijas y hijas sobre estos temas que aún, en el siglo XXI, parecen que siguen siendo tabúes y nos da vergüenza tratarlos abiertamente.