Cuando tengo la primera sesión de mis talleres en los institutos, la primera regla que les digo que hay que cumplir es el RESPETO y la educación. Respetar el turno de palabra, respetar las opiniones de las demás personas, respetar, respetar y respetar. No os creáis que es algo que puedan cumplir fácilmente. Les cuesta. Muchísimo.
No hay que respetar porque yo lo diga. No hay que hacerlo porque sea una obligación. Hay que hacerlo porque sí, porque a cada una de nosotras, como personas, nos gusta que nos traten con respeto, que acepten que pensemos distinto, que tengamos nuestras propias ideas, porque esta mezcla de opiniones, de culturas, de pensamientos hacen que la sociedad se enriquezca.
Encontré el artículo que os comparto a continuación en uno de estos días que te pones a investigar, indagar, que tienes ganas de leer un poco más detenidamente lo que escriben los demás. Habla del respeto hacia la mujer a la que quieres. Pero este texto no sólo es aplicable para las mujeres, se tiene que aplicar a todo el mundo: si quieres a esa persona, no la humilles, no la insultes, no la manipules, respétala tal como es.
http://www.piensaesgratis.com/bloggers/si-de-verdad-la-quieres-respetala